Los smartphones actuales hacen muchísimas más cosas que los de antaño, ya que en la práctica son más potentes y completos que los ordenadores que teníamos años atrás.

De ahí que también sean susceptibles de los mismos problemas que las computadoras: accesos indebidos físicamente o intentos de acceso a través de enlaces o aplicaciones maliciosas.

Aunque Android ha mejorado mucho desde su primera versión, no siempre podemos confiar en que la configuración por defecto sea suficiente para hacer frente a amigos de lo ajeno o a apps y páginas web infectadas con malware.

Para ayudarnos a mantener Android seguro, Google nos da unas cuantas recomendaciones básicas.

Evitar que accedan físicamente

A todos nos gusta acceder a nuestro Android en segundos, pero el bloqueo de pantalla nos evitará pasar un mal rato si perdemos nuestro smartphone, nos lo roban o alguien demasiado curioso decide echarle un vistazo sin nuestro permiso.

Configurar un bloqueo de pantalla es tan fácil como ir a Ajustes > Seguridad > Bloqueo de pantalla. Android ofrece muchas opciones: establecer un código PIN, una contraseña o un patrón. En algunos dispositivos incluso dispone de desbloqueo con huella digital.

Y si utilizas Android 5.0 o posterior, puedes configurar un desbloqueo automático en función de dónde estás, tal y como vimos en un artículo anterior.

Para añadir un plus de seguridad, además del bloqueo podemos cifrar su contenido. Así los datos sólo serán visibles con la contraseña adecuada.

Para llevarlo a cabo, tendremos que ir a Ajustes > Seguridad > Cifrar teléfono.

Finalmente, si queremos localizar nuestro dispositivo Android en caso de robo, conviene usar nuestra cuenta de Google e instalar la aplicación oficial Encontrar mi dispositivo.

Así, si el dispositivo está encendido y conectado a Internet, es posible bloquearlo y borrar sus datos a distancia.

Evitar problemas virtuales

Mantener tu Android seguro también implica evitar que accedan a tu dispositivo vía software malicioso, que puede infectar nuestro smartphone para extraer nuestros datos o para usarlo contra otros dispositivos conectados.

Google nos da algunas pautas básicas para disfrutar de nuestras aplicaciones y páginas web sin peligro. En resumen, basta con aplicar el sentido común.

En primer lugar, Google recomienda descargar aplicaciones de fuentes de confianza, que, cómo no, para Google es su tienda oficial de apps, Google Play.

Pero esto no es una garantía, ya que de vez en cuando se descubren aplicaciones maliciosas que lograron pasar las medidas de comprobación de Google Play. Así que, antes de descargar una app, asegúrate de que su autor es conocido, tiene página oficial y fíjate también en los comentarios de otros usuarios.

Otro aspecto a cuidar son los enlaces dañinos, normalmente, anuncios y banners que nos engañan con tretas como que nuestro dispositivo está infectado, o que nos pide nuestra contraseña para instalar algo aunque no lo hayamos solicitado.

Para evitar que alguien se haga con el control de nuestra cuenta de Google, imprescindible para usar nuestro Android, es recomendable activar la verificación en dos pasos.

Con la verificación en dos pasos, además de tu contraseña habitual deberás aportar un código adicional que recibes en tu teléfono. Encontrarás más información en la página oficial de Google.

Por otro lado, desde el apartado de seguridad de tu cuenta de Google puedes ver cuándo has accedido, desde dónde y con qué dispositivo. Así averiguarás si alguien utiliza tu cuenta sin saberlo.

Imagen | Pixabay (Autor: BiljaST)

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