La última propuesta llevada a cabo por un grupo de científicos en Corea del Sur son unas lentillas inteligentes que miden los niveles de glucosa a través de las lágrimas. El Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología de Ulsan ha publicado su investigación, todavía en proceso, en la revista científica Science Advances. Un wearable que millones de personas están acostumbradas a utilizar diariamente, y que solo llevaría un minuto para su colocación. La comunidad científica mundial ha puesto su atención en este estudio, ya que lograría mejorar la vida de millones de personas.

Un 14% de los españoles sufre diabetes tipo 1 o tipo 2. Una enfermedad cada vez más común en nuestra sociedad que, aunque no tiene cura, sí posee un tratamiento basado en hábitos de vida saludables y el seguimiento constante de los niveles de glucosa en sangre, indicativo principal de la diabetes. Para aquellos que desconozcan esta enfermedad, se trata de la incapacidad de generar insulina, una hormona encargada de la asimilación como nutriente celular de la glucosa en la sangre.

La diabetes, como otras tantas enfermedades, está ligada a procedimientos de seguimiento algo molestos para aquellos que la padecen. A pesar de los avances e innovaciones realizadas en el campo de la medicina, la gran mayoría de enfermedades siguen ligadas a las visitas constantes a la consulta del médico. Para aquellos que le tengan pánico a la agujas, la diabetes puede ser su peor pesadilla. Ya que, para llevar a cabo el seguimiento de los niveles de glucosa, el método más común se basa en la toma de pequeñas muestras sangre. Un método casi indoloro pero, desde luego, muy molesto. Es por eso que la ciencia lleva años buscando métodos alternativos.

Lentillas inteligentes con indicador LED

El prototipo que proponen desde este equipo de investigación coreano realizaría mediciones a través de unas lentillas blandas que llevarían un pequeño sistema adherido a estas. Cuando los niveles de glucosa fueran superiores o inferiores a los normales, un pequeño LED, situado en las lentes de contacto, empezaría a parpadear avisando al paciente. Sin embargo, la solución a los molestos pinchazos no parece ser tan sencilla. Un estudio realizado en los años 80 ponía de manifiesto la imposibilidad de realizar mediciones exactas utilizando la lágrima como medio.

El alto número de personas que padecen diabetes es tal que no ha pasado desapercibido para empresas como Apple que, sin éxito aparente, también han intentado encontrar propuestas alternativas: ondas que atravesarían las capas superficiales de la piel; wearables que realizarían mediciones mediante impulsos eléctricos; un láser de frecuencia. El único dispositivo eficaz hasta la fecha es un parche meramente invasivo que se comunica de forma inalámbrica con un medidor del tamaño de un móvil. Habrá que esperar un poco más y ver cómo se desarrollan estas lentillas inteligentes.

Imágenes: Science Advances

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