Muchos gamers se habrán encontrado con esta situación. Estás jugando y ves que tu consola se apaga porque necesita enfriarse después de tantas horas de juego.

También puede suceder que la videoconsola no puede guardar tu última partida debido a la falta de espacio. Ya no tienes de qué preocuparte porque te explicamos cómo optimizar tu PS4 o Xbox One.

Cuando tu consola se sobrecalienta

El sobrecalentamiento es uno de los principales problemas que tienen muchos usuarios. Nuestras videoconsolas son dispositivos muy potentes y, por lo tanto, los videojuegos son más exigentes en cuanto a los gráficos.

Cuando sucede esto, los ventiladores de nuestro dispositivo empiezan a funcionar a gran velocidad con el objetivo de enfriar el sistema, pero en ocasiones puede aparecer un aviso en nuestra pantalla y automáticamente la consola se apaga.

Este problema es muy frecuente y puede poner en riesgo la vida útil de nuestra PS4 o Xbox One.

Para evitar el sobrecalentamiento es recomendable limpiar nuestro dispositivo para evitar la obstrucción de polvo en las zonas de ventilación. Es recomendable hacer esta limpieza al menos una vez al mes, aunque esto depende del uso del dispositivo.

Otro consejo que debes tener en cuenta para evitar el sobrecalentamiento es la ubicación de tu consola. Ambas plataformas necesitan un espacio alrededor de ella para que fluya la ventilación correctamente. En este caso es recomendable no colocarla cerca de otros dispositivos que generen calor y que esté en un lugar con un ambiente fresco.

¿Problemas de memoria?

Otra de las claves para optimizar tu PS4 o Xbox One está vinculado con el espacio que tiene la memoria de nuestro dispositivo.

Los videojuegos cada vez ocupan más espacio y hay casos que llegamos al límite de memoria. Para evitarlo es recomendable eliminar aquellos archivos que no necesitemos.

Para hacer esta limpieza interna en ambos modelos, tenemos que ir al menú de almacenamiento y ya podemos gestionar nuestras aplicaciones.

La comunidad gamer también recomienda el uso de disco duros externos con el objetivo de conseguir memoria extra en nuestras consolas y conseguir un mayor rendimiento. En este caso es recomendable utilizar un dispositivo de almacenamiento que supere los 200 Gb de memoria y tenga la conexión USB 3.0.

Cuando no puedes disfrutar de la experiencia online

Con PS4 y Xbox One tenemos la opción de jugar en línea. Una experiencia que ha ido mejorando con el paso de los años, pero de vez en cuando surgen problemas de conectividad.

Estos problemas surgen con más frecuencia cuando jugamos mediante el WiFi, en ese caso es apropiado utilizar la conexión por cable de red LAN. El uso de red LAN no significa que nunca tendrás problemas de conexión, pero al menos tendrás una mayor estabilidad comparado con el WiFi.

También hay que tener en cuenta que nuestra consola nos permite modificar manualmente nuestra conexión. Por ejemplo, muchos jugadores utilizan la configuración manual para modificar algunos parámetros y así conseguir una mejor experiencia online.

IMAGEN DE CABECERA: Mónica La Mola.

¿Cómo sacar el máximo rendimiento a tu consola? es un artículo de Blogthinkbig.com.